viernes, 9 de septiembre de 2011

8 de septiembre, Nagasaki

Tempranito a la estación, y tren de dos horitas hasta Nagasaki.

Esta estación no era tan grande, pero os hacéis una idea. En esta plaza, una emisora de radio tenía un cubículo a la vista en terraza desde el que emitían:



En Nagasaki se tira de tranvía para visitar bien la ciudad. Primero la parte sur, al templo Kofukuji, el primero Obaku de Japón (1620). En esta época Tokugawa había prohibido el cristianismo, y las comunidades chinas crearon muchos templos en la zona para evitar sospechas de cristianismo. San Mon, la puerta de entrada:



Otras dos puertas. tenían un sistema para que los cerdos de los campesinos no entrasen en el templo, y la pieza inferior se podía retirar si venía algún monje de rango a visitar el templo:


El campanario:


El cuerpo principal, había mucho sol y era dificil buscar un sitio para hacer fotos. Tenía dentro una lámapa muy grande traída de Shangai y montada dentro:


Antes tenían dos peces de estos monstruosos que usaban para llamar a los monjes a comer. Solo queda este dañado:




Otro edificio, Maso do. Los barcos chinos que llegaban a puerto traían aquí capillas portátiles:



El cuerpo principal es tesero cultural protegido:


Siguiendo un canal llegué hasta el puente Magenabashi, que es el puente occidental de piedra más antiguo de Japón. Lo construyó un abad chino:


Había un grupo de escolares sacando fotos desde las piedras, y se arremolinaban las carpas:


Su nombre en inglés "spectacle bridge", viene de que con el reflejo parecen gafas los ojos del puente:


Después fui a ver el templo Sofukuji, que tenía tenía esta puerta chinesca en arco:



Varios edificios son también tesoro cultural:





En este caldero, los monjes preparaban comida para la población durante una época de hambruna:



Y así llegué al extremo sur, donde había casas de estilo holandés. En esta zona abundaban los coches chinos tirados por hombres:



Y esta es la iglesia católica Oura, la estructura gótica más antigua de Japón. La construyó un misionero francés en memoria de los 26 mártires (luego os hablo de ellos):


 Había grupos escolares visitandola, y tenían una busto de Juan Pablo II, de cuando visitó la ciudad en el 81:


El monseñor gabacho evangelizando a los paganos nipones:


Más tranvía (era barato comparado con trenes y autobuses, pero por suerte tenían un pase de día por 5 euros), y calles de barrio chino:


 La ciudad es una mezcla de culturas, con mucha influencia china (Ha sido así siempre, al parecer, debido a sus puertos). La ciudad está necesita quizá un lavado de cara (pintar las casas, renovar los carteles viejos, etc.) y los comercios parecen menos japoneses (las cosas amontonadas, peor expuestas, menos cuidado con la presencia...).

Bueno, y tras el recorrido hasta el extremo norte de la ciudad, llegué al parque de la paz:


Este es el sitio donde todos los 9 de agosto celebran las ceremonias conmemorativas de la explosión de la bomba atómica y piden la paz mundial. La fuente forma un par de alas con el agua, que dicen que es la forma del puerto:


Al fondo, la famosa estatua de la paz:


Tienen un montón de estátuas regaladas por otros países solidarizados con la trajedia, casi siempre los motivos son madres e hijos. Como esta de Italia:


Esta de Bulgaria:






China:




República democrática alemana:


Antigua Checoslovaquia:


Antigua Unión Soviética:


Campana del 33 aniversario hecha con donaciones:


Esta es la estatua central, La Estatua de la Paz, construida en el 55, por el 10º aniversario. Se hizo gracias a donaciones de todo el mundo, y Seiburu Kitamura, que era un famoso artista de Nagasaki, quería plasmar meditación e invitación a la acción:




Su brazo en alto señala el peligro de las bombas atómicas, y su brazo extendido señala el horizonte de paz. Los ojos entrecerrados son una plegaria por los muertos, está sentado en la posición de loto, de meditación, pero una de sus piernas está ya lista para levantarse y ponerse en acción.

Había varios grupos visitandola, y unos escolares estuvieron cantando delante antes de sacarse una foto:

Efectos de la explosión:

 La estatua me gusta mucho más ahora que cuando la vi por primera vez por la televisión:







Proteger nuestro futuro, de Holanda:


Polonia:





También había monumentos de Brasil, Cuba, Turquía, Estados Unidos, Argentina, Portugal y Nueva Zelanda.


Y cerca estaba la catedral de Urakami. Aquí se reunian los cristianos perseguidos por el régimen Tokugawa, y cuando tras la revolución Meiji se liberó el culto, construyeron poco a poco tras 20 años esta catedral, en su momento la más grande de Asia. Fue destruida por la bomba atómica, y la mayoría de los cristianos de Nagasaki muerieron. Los supervivientes hicieron un edificio de madera, y más tarde consiguieron reconstruirla (antes era más bonita). También con estatua del anterior Papa:



Hay una asociación en Japón que se llama Lions Club, no sé qué se trata pero he visto muchos monumentos donados por ellos. Este, entre el hipocentro de la bomba y el museo:



Y del museo qué os voy a contar, pues un poco como el de Hiroshima, también con audioguía en castellano. Muestras, datos, relatos, objetos, videos y llamamientos a la paz:


 Reloj detenido a las 11:02:


La entrada era una recreación del desastre, con hierros retorcidos y fundidos, la catedral destruida... Cambiaba la luz y pantallas mostraban poemas, datos, fotos:


La estatua de santa Inés original está en el edificio de las naciones unidas de Nueva York:


Fat Boy. Maqueta a tamaño real de la bomba de plutonio que estalló en Nagasaki:







Había bastantes ejemplos de las "sombras" dejadas por los muertos en las zonas de mayores rayos caloríficos:


Árbol quemado superviviente:




Había muchos objetos dañados por la explosión, como tejas que hirbieron, hierros retorcidos, botellas fundidas:


Daños de la bomba en la ciudad. Se llevó por delante un tercio de la misma:


Huesos de una mano entre restos:

Las fotos de heridas y otras cosas que mostraban preferí no fotografiarlas, pero las heridas eran horribles y caprichosas. Especialmente el fenómeno que hace que la piel se hinche alrededor de las quemaduras cicatrizadas y pique y duela. Sale aunque se extirpe quirúrjicamente. Pensaban que estaba relacionado con la radiación, pero no se saba a ciencia cierta a qué se debe. No aparece con otras quemaduras convencionales.

 Los vientos producidos por la explosión no tienen equivalente ni con los tifones más fuertes:



Tras pasar por la zona de relatos e historias de personajes, también con videos de entrevistas, la correspondiente zona antimilitar y de denuncia de la escalada nuclear.
Tenían un interesante video donde iban explicando año a año, las pruebas nucleares que hacía cada país, y las invenciones de nuevas armas nucleares que dejan en ridículo la bomba de plutonio.








Esta es la zona sobre la que explotó la bomba. Parque del hipocentro:


Monumento del 50 aniversario:


Restos de la catedral original:


Estos faroles del templo Shotokuji sobrevivieron:


Bueno, y para relajar tanta trajedia, nuevo viajecito en tranvía, cruzar el río, y coger el teleférico al monte Inasa.
Desde allí hay una gran vista de la ciudad, para hacerse realmente una idea de cómo es. Esto es el norte, hacia la desembocadura:


Justo en el medio el parque de la paz. Se ve la estatuta:




Hacia el este:



Y ya mirando un poco al sur:


Sudoeste, zona de islas y bahía:



 Y un puerto al oeste:


¿Pues no son vascos? estropadak!:



Festival anual de barcos:


Otros festivales de danzas y máscaras:



Festival de lámparas de invierno:


Allí abajo el teleférico:


Las islas al norte estaban entre niebla:


Japonés con teleobjetivo buscando edificios concretos:


Y ya bajando de nuevo:





Así era Nagoya hace un par de siglos:


La artéria principal estaba bastante transitada y se podían juntar igual 15 autobuses en esta vista. Yo estaba esperando un tranvía:


Y para despedirme de la ciudad, el monumento a los 26 mártires que estaba cerca de la estación:


Cuando Tokugawa decretó la prohibición de profesar el cristianismo, diferentes sacerdotes y civiles fueron detenidos en varias ciudades y trasladados a Nagasaki. Finalmente fueron crucificados en este lugar.

Aquí han levantado una capilla:


El Sea Side Liener 664:


Y se terminó Kyushu. La zona donde se mantenía el comercio con Asia, donde llegó San Francisco Javier y penetró el cristianismo, donde embarrancaron lso portugueses y vendieron las armas de fuego, y la ciudad de Madame Butterfly y Madame Chrysanthemum (no sé si se escribe así la de Loti). A dormir pronto, que mañana toca madrugar para volver hacia el este por Honshu.

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